
La importancia de llamar a las cosas por su nombre queda patente en el ahínco de algunos de no nombrarlas. Siete meses ya desde que las autoridades rusas prohibieran a los medios utilizar la palabra “guerra”. Tabú para el Kremlin, bajo penas de cierre, multa y prisión. Pero ahora, en esta no-guerra de Putin en Ucrania —sino “operación especial para proteger la soberanía y la integridad territorial de Rusia»—, se están agotando […]