
Uno de mis primeros cuentos hablaba de colores, pero de piel. De que intentan engañarnos. De que nos dicen: «blanco», «negro», «amarillo…» Hasta «piel roja» y yo, será que no soy del «blanco o negro sino toca la escala de grises», pero siempre he visto mil matices. Es más. Los matices nada tienen que ver al sol, o a la sombra, o con la ínfima luz de la luna que se […]