
Viví en Cuba en el 92, en aquellos días terribles que siguieron a la caída de la Unión Soviética y que en la isla supusieron perder el amparo que la sostenía. Conocí las jineteras que se apostaban en las zonas turísticas vendiéndoles favores sexuales a ellos y comprando la compasión de ellas y también conocí a amas de casa que se acostaban abiertamente a cambio de pollo o de azúcar. ‘Resolver’, Cuba […]